- Antonio tio estas ahi en tu casa?
- Claro que si, aqui jugando al pro!
- No tienes videoconsola Antonio! Recuerda! No te gusta ninguna!
- No no, ya lo se, pero estoy jugando en el PC.
Ahi se cortó la comunicación.
Mi amigo desapareció del auricular y continué con mi partida.
Le llovia encima, el paraguas se dio la vuelta, quiso llorar porque sentia frio y le temblaba el pulso.
Soltó el paraguas en el suelo y se tumbó bocarriba como un difunto.
La calle estaba llena de gente y nadie le tocó.
El bullicio de la avenida se tomó a mi amigo como si de un simple coqueteo con las drogas duras se tratase.
Nada mas cerca de la realidad que acontecia.
Ya no era por los vomitos, aquel circulo sin personas a su alrededor lo provocó su propia alma, su mismo ser con los ojos vueltos gritando por algo de comer.
Un individuo en gabardina se acerca a el y le pone un fajo de billetes imponente delante de la cara.
Mi amigo no oye lo que ese loco pronuncia.
El loco de la gabardina desaparece entre la lluvia fortisima.
Las gotas sobre mi amigo duelen, con cada gota grita algo distinto.
Palabras como: CAMOTA, SPIRIT, BAÑÓN Y RIUSENO sonaban por todo el barrio, como suenan esas cosas que oyes de lejos y te preguntas si alguien realmente esta gritando eso, o es ampliado por las calles. En este caso ni de coña se ampliaba. Salia asi de erecto por su boca.
Pasaron 7 horas, eran las 5:47 de la mañana en mi reloj fiable cuando empieza a sonar mi movil apenas sin bateria.
- Si?
- Antonio! Elodio! Iba a tu casa, mmm ahhhhhhhsssdddjj, voy a tu casa quiero decir!
- Ya, ven, aun puedes venir, sigo jugando al pro.
- Estoy llegando Antonio! No sabes lo que me ha pasado estoy fatal.
- Te espero. ( Justo ahi mi movil cae fulminado por la bateria)
Mi amigo llego lleno de tiza blanca mojada por la cara, no quise preguntar por eso.
- Antonio... las drogas... las drogas vuelven loca a la gente.
- Lo se! Lo reconoces?
- Mira, que si lo reconozco? QUE SI LO RECONOZCO?
- Bueno, no hace falta que me cuentes todo, es mas, no hace falta que me cuentes nada, relajate en esta silla de madera y coge el segundo mando que vamos a jugar al pro.
- Estaba deseando estar tranquilo... A ti te gustaba el futbol?
- A mi no, mira que carpa he pescado mientras te esperaba!
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